lunes, 30 de septiembre de 2013

Las Siete Reglas de Paracelso

Las Siete Reglas de Paracelso

Lo primero es mejorar la salud. Para ello hay que respirar con la mayor frecuencia posible, honda y rítmica, llenando bien los pulmones, al aire libre o asomado a una ventana. Beber diariamente en pequeños sorbos, dos litros de agua, comer muchas frutas, masticar los alimentos del modo más perfecto posible, evitar el alcohol, el tabaco y las medicinas, a menos que estuvieras por alguna causa grave sometido a un tratamiento. Bañarte diariamente, es un habito que debes a tu propia dignidad.

2º Desterrar absolutamente de tu ánimo, por más motivos que existan, toda idea de pesimismo, rencor, odio, tedio, tristeza, venganza y pobreza.
Huir como de la peste de toda ocasión de tratar a personas maldicientes, viciosas, ruines, murmuradoras, indolentes, chismosas, vanidosas o vulgares e inferiores por natural bajeza de entendimiento o por tópicos sensualistas que forman la base de sus discursos u ocupaciones. La observancia de esta regla es de importancia decisiva: se trata de cambiar la espiritual contextura de tu alma. Es el único medio de cambiar tu destino, pues este depende de nuestros actos y pensamientos. El azar no existe.

Haz todo el bien posible. Auxilia a todo desgraciado siempre que puedas, pero jamás tengas debilidades por ninguna persona. Debes cuidar tus propias energías y huir de todo sentimentalismo.

Hay que olvidar toda ofensa, mas aún: esfuérzate por pensar bien del mayor enemigo. Tu alma es un templo que no debe ser jamás profanado por el odio. Todos los grandes seres se han dejado guiar por esa suave voz interior, pero no te hablara así de pronto, tienes que prepararte por un tiempo; destruir las superpuestas capas de viejos hábitos, pensamientos y errores que pesan sobre tu espíritu, que es divino y perfecto en si, pero impotente por lo imperfecto del vehículo que le ofreces hoy para manifestarse, la carne flaca.

5º Debes recogerte todos los días en donde nadie pueda turbarte,
siquiera por media hora, sentarte lo más cómodamente posible con los ojos medio entornados y no pensar en nada. Esto fortifica enérgicamente el cerebro y el Espíritu y te pondrá en contacto con las buenas influencias. En este estado de recogimiento y silencio, suelen ocurrírsenos a veces luminosas ideas, susceptibles de cambiar toda una existencia. Con el tiempo todos los problemas que se presentan serán resueltos victoriosamente por una voz interior que te guiara en tales instantes de silencio, a solas con tu conciencia. Ese es el daimon de que habla Sócrates.

6º Debes guardar absoluto silencio de todos tus asuntos personales. Abstenerse, como si hubieras hecho juramento solemne, de referir a los demás, aun de tus más íntimos todo cuanto pienses, oigas, sepas, aprendas, sospeches o descubras. por un largo tiempo al menos debes ser como casa tapiada o jardín sellado. Es regla de suma importancia.

7º Jamás temas a los hombres ni te inspire sobresalto el día de mañana.

Ten tu alma fuerte y limpia y todo te saldrá bien.
Jamás te creas solo ni débil, porque hay detrás de ti ejércitos poderosos, que no concibes ni en sueños.
Si elevas tu espíritu no habrá mal que pueda tocarte.
El único enemigo a quien debes temer es a ti mismo.
El miedo y desconfianza en el futuro son madres funestas de todos los fracasos, atraen las malas influencias y con ellas el desastre.

Si estudias atentamente a las personas de buena suerte, veras que intuitivamente, observan gran parte de las reglas que anteceden. Muchas de las que allegan gran riqueza, muy cierto es que no son del todo buenas personas, en el sentido recto, pero poseen muchas virtudes que arriba se mencionan. Por otra parte, la riqueza no es sinónimo de dicha; Puede ser uno de los factores que a ella conduce, por el poder que nos da para ejercer grandes y nobles obras; pero la dicha más duradera solo se consigue por otros caminos; allí donde nunca impera el antiguo Satán de la leyenda, cuyo verdadero nombre es el egoísmo. Jamás te quejes de nada, domina tus sentidos; huye tanto de la humildad como de la vanidad. La humildad te sustraerá fuerzas y la vanidad es tan nociva, que es como si dijéramos: pecado mortal contra el Espíritu Santo.

martes, 24 de septiembre de 2013

¿Durante cuánto tiempo puede permanecer una mujer en su casa?

¿Durante cuánto tiempo puede permanecer una mujer en su casa?

Hasta que pueda o hasta que sienta la necesidad de regresar de allí. ¿Con cuánta frecuencia necesita hacerlo? Con mucha más frecuencia si la mujer es "sensible" y desarrolla una gran actividad en el mundo exterior. Con menos frecuencia si tiene una piel muy dura y no transcurre tanto tiempo "allí afuera". Cada mujer sabe en su fuero interno con cuánta frecuencia y durante cuánto tiempo lo necesita. Es cuestión de valorar el brillo de nuestros propios ojos, la resonancia de nuestro estado de ánimo, la vitalidad de nuestros sentidos. 

¿Cómo equilibrarnos la necesidad de regresar a casa con nuestra existencia cotidiana? Planificando de antemano el hogar en nuestra vida. Siempre es un motivo de asombro la facilidad con que las mujeres "sacan el tiempo de donde sea" cuando surge una enfermedad, cuando el niño las necesita, cuando el coche sufre una avería, cuando les duele una muela. Hay que atribuir el mismo valor al regreso a casa y, en caso necesario, incluso se le tiene que otorgar el carácter de crisis, pues está demostrado que, si una mujer no se va cuando es la hora de irse, la fina grieta de su alma/psique se convierte en un barranco y el barranco se convierte en un impresionante abismo. 

Si la mujer valora al máximo sus ciclos de regreso a casa, aquellos que la rodean también aprenderán a valorarlos. Pero no cabe duda de que también se puede disfrutar del "hogar", reservando un poco de tiempo de nuestra rutina cotidiana, un tiempo que tiene que ser sagrado Y estar dedicado exclusivamente a nuestra propia persona. La frase "dedicado exclusivamente a nuestra propia persona" puede significar cosas distintas para distintas mujeres. Para algunas el hecho de encerrarse en una habitación, pero estar disponible para los demás puede sor un estupendo regreso a casa. Otras, en cambio, necesitan que no se produzca la más mínima interrupción cuando se sumergen en el hogar. Nada de: "Mami, mami, ¿dónde están mis zapatos?" Nada de: "Cariño, ¿necesitamos algo de la tienda?" 

Para una mujer de este tipo la entrada a su hogar profundo es el silencio. No me molestes. El Silencio Absoluto, con S y A mayúsculas. Para ella, el aullido del viento entre los árboles es el silencio. Para ella, un trueno es el silencio. El orden propio de la naturaleza que no pide nada a cambio es el silencio que da la vida. Cada mujer elige lo que puede y lo que debe. 

Cualquiera que sea el período de tiempo que permanezcamos en nuestro hogar, tanto si es una hora como si son varios días, recuerda que otras personas pueden cuidar de tus gatos aunque tus gatos digan que sólo tú lo sabes hacer bien. Tu perro intentará hacerte creer que estás abandonando a un niño en la carretera, pero te perdonará, La hierba se marchitará un poco, pero reverdecerá. Tú y tu hijo os echaréis mutuamente de menos, pero os alegraréis de veros a tu regreso. Puede que tu pareja refunfuñe. Lo superará. 

Permanecer demasiado tiempo lejos de casa es una locura. Regresar a casa es la cordura. 
Cuando la cultura, la sociedad o la psique no soportan este ciclo del regreso a casa, muchas mujeres aprenden a saltar la verja o a pasar por debajo de la 
valla. Adquieren una enfermedad crónica y roban el tiempo de lectura en la cama. 
Esbozan una sonrisa toda dientes como si todo marchara sobre ruedas e inician 
una sutil labor de aplazamiento mientras dura la situación. 
Cuando el ciclo del regreso a casa de las mujeres sufre algún trastorno, 
muchas creen que, para poder sentirse libres de marcharse y satisfacer sus necesidades psíquicas, tienen que pelearse con su jefe, con sus hijos, con sus padres o con su pareja. Y entonces se produce el estallido y la mujer dice: "Bueno pues, me voy. Como eres tan... (llena tú misma el espacio en blanco) y está claro que no te importa... (llena tú misma el espacio en blanco), me voy y san se acabó." Sube al coche y en medio del rugido del motor y de una polvareda de grava, se larga sin más. 

Cuando una mujer tiene que luchar por lo que en justicia le corresponde, siente que su deseo de regresar a casa está absolutamente justificado. Es interesante observar que, en caso necesario, los lobos luchan para conseguir lo que quieren, tanto si se trata de comida comO si se trata de sueño, sexo o tranquilidad. Podría parecer que la lucha por conseguir lo que uno quiere es la adecuada reacción instintiva cuando la persona tropieza con obstáculos. Sin embargo, en el caso de muchas mujeres la lucha se tiene que combatir también, o exclusivamente, en su interior contra todo el complejo interno que niega su necesidad. Por otra parte, el hecho de haber estado en casa y haber regresado de  allí permite que una mujer pueda rechazar con más eficacia una cultura agresiva. 

En caso de que la mujer tenga que librar una batalla cada vez que se va, 
quizá le convenga sopesar cuidadosamente sus relaciones con los que la rodean, tratando de hacerles comprender a los suyos que será mejor y distinta cuando regrese, que no les abandona sino que está aprendiendo de nuevo a ser ella misma y a regresar a su verdadera vida.

 En caso de que sea una artista, conviene que se rodee de personas que comprendan su necesidad de regresar a casa con más frecuencia que la mayoría de la gente, pues cabe la posibilidad de que necesite minar el terreno psíquico de su hogar más a menudo que otras mujeres para poder aprender los ciclos de la creación. Por consiguiente, hay que ser breve, pero inflexible. Mi amiga Normandi, una excelente escritora, dice que lo ha practicado y que, al final, lo ha reducido a un simple: "Me voy." Son las mejores palabras que hay. Pronúncialas. Y vete. 

La magnitud del tiempo útil y/o necesario que se tiene que pasar en casa varía de mujer a mujer. La mayoría de nosotras no puede permanecer ausente todo el tiempo que quisiera y, por consiguiente, aprovecha el tiempo que puede. De vez en cuando, permanecemos ausentes todo el tiempo que necesitamos. 

Otras veces permanecemos ausentes hasta que empezamos a echar de menos lo que hemos dejado. A veces nos sumergimos y afloramos de nuevo a la superficie a rachas. Casi todas las mujeres que regresan a sus ciclos naturales procuran establecer un equilibrio entre las circunstancias y las necesidades. Pero de lo que no cabe duda es de que conviene tener una maletita a punto junto a la puerta. 
Por si acaso. 

Clarissa Pinkola Estés Mujeres que corren con los lobos

El hogar es la prístina vida instintiva


El hogar es la prístina vida instintiva


El hogar es la prístina vida instintiva que funciona tan suavemente como 
un eje que se desliza sobre su engrasado cojinete, donde todos los ruidos suenan bien, la luz es agradable y los olores nos tranquilizan en lugar de alarmarnos. La  manera en que una pase el tiempo a la vuelta no tiene importancia. Lo esencial  es cualquier cosa que revitalice el equilibrio. Eso es el hogar. 

Allí no sólo hay tiempo para meditar sino también para aprender y descubrir lo olvidado, lo abandonado y lo enterrado. Allí podemos imaginar el futuro y 
examinar también los mapas de las cicatrices de la psique, averiguar sus causas y adónde iremos a continuación. Tal como escribe Adrienne Rich a propósito de la recuperación del Yo en su evocador poema "La inmersión en los restos del naufragio": (14)
Hay una escalera de mano. 
La escalera de mano siempre está ahí 
colgando inocentemente 
cerca del costado de la goleta... 
Desciendo... 
Vine para explorar el naufragio... 
Vine para ver los daños que ha habido 
y los tesoros que se han conservado... 

Lo más importante que puedo decir acerca del momento más oportuno de 
este ciclo del regreso al hogar es lo siguiente: Cuando es la hora, es la hora. Aunque la mujer no esté preparada, aunque las cosas no estén hechas, aunque hoy  tenga que llegar el barco. Cuando es la hora es la hora. La mujer foca regresa al  mar, no porque le apetece, no porque hoy es un buen día para ir, no porque su  vida está limpia y ordenada; no existe ningún momento limpio y ordenado para  nadie. Se va porque es la hora y, por consiguiente, se tiene que ir.

Todas tenemos nuestros métodos preferidos para convencernos de la necesidad de buscar el momento para regresar a casa; sin embargo, cuando recuperamos nuestros ciclos instintivos y salvajes, tenemos la obligación psíquica de ordenar nuestra vida de tal forma que podamos vivirla cada vez más de acuerdo con ellos. Las discusiones a propósito del acierto o el desacierto de la despedida para poder regresar a casa carecen de sentido. La simple verdad es que cuando es la hora, es la hora (15). 

Algunas mujeres nunca regresan a casa y siguen viviendo su vida en la zona zombi. Lo más cruel de su estado exánime es que la mujer actúa, camina, 
habla, se comporta e incluso hace un montón de cosas, pero ya no percibe los 
efectos de lo que ha fallado. Si los percibiera, su dolor la obligaría a solventar el fallo. 

Pero no, la mujer que se encuentra en semejante estado sigue avanzando 
medio ciego con los brazos extendidos para defenderse de la angustiosa pérdida  del hogar. Tal como dicen en las Bahamas: "Se ha vuelto sparat", es decir, su alma se ha ido sin ella y la ha dejado debilitada, haga lo que haga.

En este estado las mujeres experimentan la extraña sensación de hacer 
muchas cosas que no les producen la menor satisfacción. Hacen lo que creen que deseaban hacer, pero el tesoro que sostenían en sus manos se ha trocado en cierto modo en polvo. Es bueno que una mujer en semejante estado tenga esta percepción. El descontento es la puerta secreta que permite acceder a un cambio significativo y propiciador de vida. 

Las mujeres con quienes yo he trabajado y que llevan veinte anos o más lejos de casa siempre rompen a llorar cuando vuelven a poner por primera vez los 
pies en ese terreno psíquico. Por distintas razones que en su momento parecían buenas, se habían pasado muchos años aceptando un exilio permanente de su  patria y habían olvidado lo inmensamente beneficioso que es el hecho de que la lluvia caiga sobre la tierra seca. 

Para algunas, el hogar es el inicio de una actividad. Algunas vuelven a cantar tras haberse pasado varios años sin encontrar ninguna razón para hacerlo. Se 
entregan al aprendizaje de algo que llevaban mucho tiempo deseando aprender. 

Buscan a personas y cosas perdidas de sus vidas. Recuperan la voz y escriben. Descansan. Hacen suyo un rincón del mundo. Toman grandes o extremas decisiones. Hacen algo que deja huella. 

Para algunas mujeres el hogar es un bosque, un desierto, un mar. En realidad, el hogar es holográfico. Se desarrolla en toda su plenitud incluso en un solo árbol, un solo cacto del escaparate de una tienda, un estanque de serenas 
aguas. Se desarrolla también en toda su potencia en una amarilla hoja caída sobre el asfalto, una roja maceta de arcilla que espera la plantación de una raíz o  una gota de agua sobre su tierra. Cuando una mujer se concentra con los ojos del alma, ve el hogar en muchísimos lugares. 

Clarissa Pinkola Estés Mujeres que corren con los lobos

¿Qué es el ansia de hogar?



¿Qué es el ansia de hogar?

Es el instinto de volver, de ir al lugar recordado.

Es la capacidad de encontrar tanto de día como de noche el propio hogar. Todas sabemos cómo regresar a casa. Por mucho tiempo que haya transcurrido, sabemos encontrar el camino. Caminamos de noche cruzando tierras extrañas y tribus desconocidas sin ningún mapa, preguntando a los viejos personajes que encontramos por el camino: "¿ Por dónde se va?"

La respuesta exacta a la pregunta "¿ Dónde está el hogar?" es más complicada, pero se trata en cierto modo de un lugar interior, de un lugar del tiempo más que del espacio, en el que una mujer se siente entera. El hogar está allí donde un pensamiento o un sentimiento se puede conservar sin que se interrumpa o nos sea arrebatado porque otra cosa exige nuestro tiempo y nuestra atención. 

lo largo de los siglos las mujeres han encontrado miles de maneras de tenerlo y crearlo, aunque sus deberes y sus tareas fueran interminables.
Lo aprendí por primera vez en la comunidad de mi infancia, donde muchas
piadosas mujeres se levantaban antes de las cinco de la madrugada y con sus
largos vestidos oscuros atravesaban el gris amanecer para arrodillarse en la fría nave de la iglesia, con la visión periférica cortada por las babushkas que se echaban sobre la cabeza. Allí hundían el rostro en las enrojecidas manos y rezaban, le contaban a Dios sus cosas y se llenaban de paz, de fortaleza y de perspicacia. Mucha, veces mi tía Katerin me llevaba consigo. Una vez le dije:
—Qué tranquilo se está aquí y qué bonito es.
Ella me guiñó el ojo y me hizo señas de que callara.
—No se lo digas a nadie; es un secreto muy importante.

Y así era en efecto, pues el camino hacia la iglesia al amanecer Y el oscuro
interior del templo eran los dos lugares de aquella época en que estaba prohibido molestar a una mujer.

Es justo que las mujeres se esfuercen por salir, se liberen, tomen, hagan,
conspiren y afirmen su derecho a regresar a casa. El hogar es un estado de ánimo continuado o una sensación que nos permite experimentar sentimientos no necesariamente manifestados en el mundo exterior asombro, visión, paz, liberación de las preocupaciones, de las exigencias, de los constantes parloteos. Todos estos tesoros del hogar se tienen que almacenar en la psique para su posterior utilización en el inundo de arriba.

Aunque hay muchos lugares físicos a los que una puede ir para "sentir" su
regreso a este hogar especial, el lugar físico propiamente dicho no es el hogar; es tan sólo el vehículo que mece al ego para que se duerma mientras recorremos el resto del camino solas. Los vehículos que utilizan las mujeres para regresar a casa son muchos: la música, el arte, el bosque, la espuma del mar, el amanecer, la soledad.  Todos ellos nos conducen al nutritivo mundo interior del hogar que posee sus propias ideas, su orden y su sustento.

El hogar es la prístina vida instintiva que funciona tan suavemente como
un eje que se desliza sobre su engrasado cojinete, donde todos los ruidos suenan bien, la luz es agradable y los olores nos tranquilizan en lugar de alarmarnos. La manera en que una pase el tiempo a la vuelta no tiene importancia. Lo esencial es cualquier cosa que revitalice el equilibrio. 
Eso es el hogar.

Clarissa Pinkola Estés Mujeres que corren con los lobos




viernes, 20 de septiembre de 2013

CAMBIANDO LOS : YO NO PUEDO EN TU VIDA ....por... YO NO QUIERO.


















 CAMBIANDO LOS : YO NO PUEDO EN TU VIDA ....por... YO NO QUIERO.

TAREA PARA HOY: cambia: yo no puedo tal cosa por... YO NO QUIERO. Esa palabra cambiara toda la dirección del poder que le das a las cosas sobre ti, e inicias el poder que tú tienes sobre tu vida y tus asuntos. MTirone
 Obsérvate y píllate diciendo le a algo, o alguien es que no puedo hacer esto o aquello, y cambia la oración y el discurso mentalmente, POR: es que NO QUIERO HACER ESTO O AQUELLO... tendrás nuevos insights sobre ti mismo, tus elecciones y tus decisiones.

 Cuando sustituyes tus NO PUEDOS... POR NO QUIERO, se te revelara tu verdadero yo, tus verdaderos deseos, cubiertos por un falso NO PUEDO...la verdad es que en tu INTERIOR... NO LO QUIERES DE VERDAD.
·          
 ESCUCHA TAMBIEN LOS yo no puedo de los demás, y cámbialos por yo no quiero, eso te dará una perspectiva real y verdadera de lo que realmente piensan sobre un asunto determinado las personas con las cuales compartes y te rodeas.

Una vez que re escribas la oración o re edites la oración con YO NO QUIERO, pregúntate las razones por las cuales realmente no quieres eso. Es una forma de indagar en nuestro interior, y fortalecernos para empoderarnos y salir de la frustrante actitud del victima impotente de las circunstancias y de la vida.

Ejercicio;
Es que yo no puedo…………….. deshacerme de esto o aquello, sustitúyelo por
Es que yo no quiero …………….  Deshacerme de esto o aquello porque ....

Es que yo no puedo ir………….. en este momento, sustitúyelo por
Es que yo no quiero ir………….. en este momento porque....

Es que no tengo tiempo para hacer ……………, Sustitúyelo por
Es que no me interesa tener tiempo para………….., por que 

No puedo en este momento establecer esto:…………… como una prioridad en mi vida.
Es que no deseo ( o quiero) establecer esto……………. Como una prioridad en mi vida, porque ...

NO puedo invertir en este negocio porque no tengo el capital suficiente para hacerlo, sustitúyelo por
No quiero invertir en ese negocio debido a que no me interesa crear el capital suficiente para hacerlom porque...

No puedo ver a la persona porque mi agenda tan ocupada me impide hacerlo, sustitúyelo por
No quiero ver a la persona  porque  mi agenda tan ocupada  me permite justificar el no hacerlo, porque ...

Las excusas de todo tipo serán desenmascaradas cuando las sustituyas mentalmente o por escrito por la palabra NO QUIERO, no lo deseo, eso nos pondrá en contacto con nuestras verdaderas razones por las cuales no deseamos y no queremos llevar hacia adelante un proyecto,como por ejemplo;  salir de una relación que ya no funciona, no intentar llevar a la realidad algunos deseos o sueños, no cumplir con promesas que habíamos hecho y que con el tiempo encontramos  las mil y una excusas para no  consumarlas.

Al finalizar el ejercicio, coloca las razones por las que no quieres hacer determinadas cosas o proyectos, verlas escritas en un papel, sacarlas de tu inconsciente , visualizarlas con respeto te permitirán tener una mejor perspectiva de quien tu realmente eres y de lo que en verdad deseas hacer, y porque, con ello podrás alcanzar internamente una gran coherencia que seras capaz de trasmitirles a las personas con las cuales te relaciones en el trabajo, en tu hogar , familia, amistades. 

Conocernos y aceptarnos a nosotros mismos  es el trabajo mas importante de nuestras vidas, al reconciliarnos con nosotros mismos y nuestros verdaderos deseos y preferencias, podremos comunicarnos con los demás con una mayor asertividad y autenticidad.

En el fondo de todos esos no puedos, están escondidas razones reales y validas para tu persona, que te indican el porqué no deseas realmente llevar hacia adelante algunos proyectos, esta pequeña tarea nos permite acercarnos a nosotros mismos y por ende a nuestra verdad interior.

Recuerda, este pensamiento de Richcar Bach : 
“Los semejantes se atraen. Limítate a ser quien eres: Sereno, Transparente y Brillante. Cuando irradiamos lo que somos, cuando solo hacemos lo que deseamos hacer, esto aparta automáticamente a quienes nada tienen que aprender de nosotros y atrae a quienes sí tienen algo que aprender y también algo que enseñarnos…”

Manos a la Obra!!!!!!

Maria Tirone

miércoles, 18 de septiembre de 2013

Chacras del cuerpo humano

Chacras del cuerpo humano

Chacras del cuerpo humano Chica desnuda con los chacras tatuados en la parte trasera de su cuerpo
http://www.flickr.com/photos/pinkygomez/4660169272/in/photostream/
Los chacras una palabra que nació en la india y viene del sánscrito, significa rueda, o disco, se describe como un remolino que gira.
Los chacras, no debemos de imaginar que son sinónimos de ninguna estructura del cuerpo físico, si no que se superpone a él, son centros de canalización de la energía vital.
Según diferentes prácticas, filosofías o culturas, en su utilización, usan gran número de chacras. Aunque en occidente es común usar solo siete, ya que son los principales para armonizar el cuerpo.
Los siete chacras corresponde a la parte más espiritual de nuestro ser, de la cual, tenemos noción a través de nuestros pensamientos y sentimientos.
Los siente chacras en conjunto modelan la conciencia y permiten conocernos mejor, en lo mental, en lo corporal y en lo espiritual.
Los siete chacras esta inseparablemente relacionados, un bloqueo en el funcionamiento de cualquiera de ellos puede afectar en el funcionamiento de los que le preceden o de los que le siguen.
La configuración de lo chacra se forma en mayor medida por la repetición de nuestras pautas en la vida cotidiana. Se dice que en el mundo físico los chacras representarían a las glándulas de nuestro cuerpo.
Originariamente los chacras se vinculaban a una deidad femenina llamada Cundalini.
Descrita como una serpiente que duerme, enrollada tres vueltas y media al rededor del primer chacra en la base de la espina dorsal. En la tradición hindú esta diosa despierta y comienza a subir chacra a chacra hasta alcanzar la corona por encima de cráneo. Cuando ha subido se dice que la persona a alcanzado el despertar (la iluminación).
Cada chacra contiene un nivel de información:

Muladhara

El primer chacra, es el chacra del cuerpo físico, conocido con el nombre Muladhara, (que significa raíz, fundamento) está situando en la base de la columna vertebral cerca del coxis. Este chacra se relaciona directamente con el elemento tierra y con este elemento simboliza, los pies, la piel, los hueso de todo el cuerpo, el cabello, el cuerpo, la materia en sí.
Está relacionado con la auto afirmación, la fuerza, la vitalidad, la confianza en uno mismo, la sexualidad, la supervivencia, el dinero, la realidad, del aquí y ahora, materializar la vida.
Este centro nos abre para que podamos viajar a nuestro interior con el fin de descubrir los fundamentos de nuestras creencias básicas, está relacionado con el intestino y las glándulas suprarrenales.
Generalmente los niños hasta los siete años se rigen siguiendo el impulso del primer centro, que representa el cobijo. El color predominante, es el rojo. Su sentido, el olfato. La fuerza activa principal, es la gravedad.

Svadhisthana

El segundo chacra, tiene que ver con el cuerpo emocional, su nombre en sánscrito esSvdhisthana(Que significa, dulzura, lugar donde mora el ser) Se localiza en la parte baja del abdomen a cuatro dedos por debajo del ombligo. Es el centro de energía de las entrañas.
Está relacionado con el elemento agua, con esto se relaciona la sangre, la grasa, el semen, la orina, mucosidad, saliva y fluidos linfáticos del cuerpo. Tres cuartas partes de la tierra son agua, al igual que tres cuartas partes del ser humano también son agua. Este centro está en plena relación con la luna y por lo tanto con nuestras relaciones. Su potencial principal es el temor, la ira, y la violencia.
Si una persona se queda estancada en el segundo chacra entonces las condiciones para armonizar su cuerpo con todo lo relacionado con el amor, la amistad, la compasión, no podrán nunca crearse.
Se encarga también de distribuir la energía, esta también relacionado con el impulso de vida, el movimiento intenso, la intimidad, la fuerza sexual, el goce de vivir, el erotismo.
El segundo centro de energía abre el archivo de nuestras creencias. Tanto en lo que se refiere a la creatividad y a la sexualidad. Regula a sí mismos las digestiones, los jugos gástricos, el sistema urinario, ovarios, próstata, testículos, y está regido por las glándulas gónadas.
El niño entre los 8 y 14 años generalmente actúa desde el segundo chacra de energía. Satisfechas sus necesidades de alimento y abrigo despierta la imaginación, evolucionando a una conciencia nueva, descubriendo su propio cuerpo físico.
El color predominante de este chacra, es el naranja. Su sentido, es el gusto. Su fuerza activa principal, la atracción de los opuestos.

Manipura

El tercer chara, pertenece al cuerpo astral su nombre en sánscrito es Manipura (que significa gema lustrosa). La duda y la confianza son sus dos formas.
Cuando la duda se transforma, llega la confianza.
Guarda correspondencia con el elemento fuego y su finalidad es la trasformación.
Está literalmente relacionado, con la expresión emocional, con el poder, la voluntad, con la posibilidad de conectar con el aspecto positivo de la vida y de las cosas. Despierta la imaginación al empujar la fuerza creadora.
Esta situado, entre el ombligo y el plexo solar encima del estomago aproximadamente, allí donde confluyen los sistemas respiratorio y digestivo, este centro también se llama cerebro abdominal.
Es un importante centro nervioso generador del impulso y del movimiento.
Tiene que ver con la capacidad de digerir en el más amplio sentido de la palabra. No solamente la digestión correcta de los alimentos, sino también digerir los procesos de cambio, situaciones y etapas de la vida.
Entre los catorce y 21 años la persona está regida por este centro que le impulsa a formar su propia identidad y a desarrollar su identidad como individuo.
Su color predominante, es el amarillo. Su sentido, es la vista. Su fuerza activa principal es la combustión.
El plexo solar es como un gran almacén de energía, en realidad es el sol del cuerpo y del sistema nervioso. Cuando este sol brilla con toda intensidad, nos llenamos de fuerza y de vitalidad.

Anahata

El cuarto chacra corresponde al cuerpo mental, su nombre en sánscrito es Anahata(que significa intacto).
Esta localizado a la altura del corazón físico y el plexo solar aproximadamente.
Desde este centro emana la compasión, permitiendo la compresión del por qué y del para que, de aquello que percibimos.
El elemento que lo rige es el aire. El aire provoca el movimiento encargándose el cuarto chacra de expandir la energía en todas la direcciones, tanto hacia los centros inferiores, como superiores.
Los órganos que lo rigen son los pulmones y el corazón.
De los 21 a los 28 años la persona está influenciada por el cuarto chacra. La glándula timo está directamente relacionada con el corazón y controla la energía vital del cuerpo.
Esta glándula, se halla a la altura del esternón en el medio del pecho. Se encarga de armonizar y de equilibrar la salud. Se relaciona con el afecto, el amor, y los vínculos.
Abrir las puertas del corazón, nos permite liberar el amor reprimido en las corazas, y desarrollar en nosotros la capacidad de dar y de recibir.
El amor no solo significa dar a otros, al mismo tiempo significa darnos amor a nosotros mismos. Es muy importante encontrar el equilibrio entre lo que hacemos por los demás, y lo que hacemos para nosotros mismos. Debemos por tanto aprender a dar, y a recibir, ya que si solo damos y no recibimos nos desequilibramos.
El aspecto predomínate de este chacra, es conseguir el equilibrio entre los tres centro que hay por encima del corazón y los tres que hay por debajo.
El color que se relaciona con él es el verde. Su sentido es el tacto. La fuerza principal activa es el equilibrio.

Visuddha

El quinto chacra es el visuddha que significa purificación, está localizado en la garganta y abre las puertas a la expresión vocal, mediante la cual podemos comunicarnos y expresarnos. También nos abre al intelecto y al aprendizaje.
Actúa sobre las glándulas tiroides, paratiroides, y pulmones.
Alivia los trastornos del lenguaje, armoniza pensamientos, y sentimientos.
Facilita los cambios, soltarse y aflojarse.
Nos ayuda a confiar en el fluir de la vida, y de la existencia.
El quinto chacra corresponde al cuerpo espiritual, en este chacra no existe la dualidad, se equilibran la energía masculina y la femenina.
Esta simbolizado por una luna creciente, representando el sonido cósmico, totalmente puro.
La garganta es donde se a fianza el sonido, para así, luego expandirse por todo el cuerpo, tanto a nivel interno como externo.
Su color predomínate es el azul brillante. Su sentido la audición. El elemento es el sonido. Su fuerza activa principal es la vibración simpática.

Ajna

El sexto chacra, es el cuerpo cósmico. Su nombre en sánscrito es ajna que significa percepción, visión ilimitada.
Está situado en el entrecejo es el que observa sin juzgar y sugiere el desarrollo de la atención, activa el tercer ojo. Estimulando la habilidad de ver mas allá, así como con nuestros ojos, podemos ver el pasado y el presente, al sensibilizar este centro nos permite desarrollar nuestra intuición.
Su color predomínate, el azul oscuro. Este centro de energía se relaciona con la glándula pituitaria. Su elemento es la luz en su función intervienen, la vista y la inducción. El desarrollo de la visualización, es la capacidad para recuperar, crear, y proyectar imágenes sobre la pantalla mental.

Sahasrara

El séptimo chacra, es llamado sahasrara que significa multiplicado por mil. Está en la corona del cráneo, en la parte superior, en el plexo cerebral. El símbolo de este chacra, es la flor de loto, es la iluminación. Es como una antena que nos pone en conexión con niveles superiores de conciencia y energía, permitiéndonos elevarnos a la conciencia de que somos parte de un todo.
Representa a las estructuras conscientes e inconscientes de nuestros pensamientos y sistemas de creencias.
El elemento predominante es el pensamiento. Su función es la de entender, comprender, así como los anteriores, corresponden al deber, hablar, expresar, actuar, o sentir.
En relajación podemos conseguir, una armonización energética por medio de la respiración, concentración, y visualizacion, de los diferentes centros energéticos.
Dicho centro de energía se relaciona con la glándula pineal. El color predominante es el violeta y significa mil pétalos.

martes, 17 de septiembre de 2013

Las diosas obscenas.

Las diosas obscenas.

Hay un ser que habita en el subsuelo salvaje de la naturaleza femenina. Esta criatura es nuestra naturaleza sensorial y, como cualquier criatura integral, tiene sus propios ciclos naturales y nutritivos. Este ser es inquisitivo, amante de la relación, a veces rebosa energía y otras permanece en estado de reposo. Reacciona a los estímulos sensoriales: la música, el movimiento, la comida, la bebida, la paz, el silencio, la belleza, la oscuridad(1).
Este aspecto de la mujer es el que posee calor. No un calor del tipo “Vamos a acostarnos, nena”, sino un fuego subterráneo cuyas llamas suben y bajan cíclicamente. A partir de la energía que allí se libera, la mujer actúa según le parece. El calor de la mujer no es un estado de excitación sexual sino un estado de intensa conciencia sensorial que incluye su sexualidad, pero no se limita a ésta.
Mucho se podría escribir acerca del uso y el abuso de la naturaleza sensorial de las mujeres y acerca de la manera en que ellas y los demás reprimen sus ritmos naturales o intentan apagarlos por completo. Pero vamos a centrarnos en su lugar en un aspecto que es ardiente y decididamente salvaje y despide un calor que mantiene caldeadas las bajas sensaciones. En la época moderna apenas se ha prestado atención a esta expresión sensorial de las mujeres y, en muchos lugares y momentos, incluso se la ha desterrado por completo.
Hay un aspecto de la sexualidad de las mujeres que en la antigüedad se llamaba lo obsceno sagrado, no con el significado con que hoy utilizamos la palabra “obsceno” sino con el de “sexualmente sabio e ingenioso”, y se tributaban a las diosas unos cultos dedicados en parte a la irreverente sexualidad femenina. Los ritos no eran despreciativos sino que más bien pretendían representar algunas partes del inconciente que incluso hoy en día siguen siendo misteriosas e inexploradas.
La idea misma de la sexualidad como algo sagrado y, más concretamente, de la obscenidad como un aspecto de la sexualidad sagrada, es esencial para la naturaleza salvaje.
Había en las antiguas culturas femeninas unas diosas de la obscenidad así llamadas por su ingenua y, sin embargo, astuta lascivia. Pero el lenguaje, por lo menos en castellano, dificulta enormemente la comprensión de las “diosas de la obscenidad” como no sea en términos vulgares.
He aquí el significado del adjetivo “obsceno” y otros vocablos afines. A través de estos significados creo que se comprenderá por qué razón este aspecto del antiguo culto de la diosa fue desterrado bajo tierra.
Me gustaría que mis lectores consideraran estas tres definiciones de diccionario y sacaran sus propias consecuencias:
  • Sucio: El significado del término se ha extendido hasta abarcar cualquier tipo de suciedad y especialmente el lenguaje obsceno*.
  • Palabrota: Palabra obscena, expresión utilizada también actualmente para designar algo que se ha convertido en social o políticamente impopular o sospechoso, a menudo a causa de críticas y descalificaciones injustificadas o por no seguir las tendencias del momento.
  • Obsceno: del hebreo antiguo Ob, con el significado de “maga”, “bruja”.
Todos estos términos tienen cierto carácter despectivo Y, sin embargo, subsisten en todas las culturas mundiales vestigios de cuentos que han sobrevivido a las distintas purgas. En ellos se nos dice que lo obsceno no es vulgar en absoluto sino que más bien se parece a una especie de criatura de naturaleza fantástica que uno quisiera tener por amiga y cuya visita desearía con toda el alma recibir.
Hace unos años, cuando empecé a narrar “cuentos de la diosa obscena”, las mujeres sonreían y después se reían al oír los relatos de las hazañas de las mujeres, tanto reales como mitológicas, que utilizaban su sexualidad y su sensualidad para conseguir un objetivo, aliviar una pena o provocar la risa, y, por este medio, enderezar algo que se había torcido en la psique. También me llamó la atención la forma en que las mujeres se aproximaban al umbral de la risa cuando se hablaba de estas cuestiones. Primero tenían que apartar a un lado todas las enseñanzas recibidas, según las cuales reírse de aquella manera no era propio de una señora.
Y yo comprobaba que el hecho de ser una señora en una situación apropiada ahogaba a una mujer en lugar de ayudarla a respirar. Para saber reír hay que poder exhalar el aire e inspirar en rápida sucesión. Sabemos por la quinesiología y otras terapias corporales como el Hakomi que el hecho de inspirar nos hace experimentar sensaciones y que, cuando no queremos sentir nada, contenemos la respiración.
Cuando se ríe la mujer respira libremente y, al hacerlo, es posible que empiece a experimentar unas sensaciones no autorizadas. ¿Y qué clase de sensaciones son ésas? Pues bien, en realidad, no son sensaciones sino un alivio y un remedio para las sensaciones, un alivio y un remedio que a menudo dan lugar a la liberación de lágrimas reprimidas y a la recuperación de recuerdos olvidados o a la rotura de las cadenas de la personalidad sensual.
Comprendí que la importancia de estas antiguas diosas de la obscenidad quedaba demostrada por su capacidad de soltar lo que estaba demasiado tenso, borrar la tristeza, provocar en el cuerpo una especie de humor que no pertenece al intelecto sino al cuerpo y mantener expeditos estos canales.
Las travesuras y el humor de las diosas obscenas pueden hacer que una vital modalidad de medicina se extienda por todos los sistemas neurológicos y endócrinos del cuerpo.
Clarissa Pínkola. “Mujeres que corren con los lobos”

La Mujer ingenua y el depredador.

La Mujer ingenua y el depredador.

 Al comienzo de nuestra Vida, nuestro punto de vista femenino es muy ingenuo, es decir, nuestra comprensión emocional de lo oculto es muy débil. Pero es ahí donde todas empezamos como hembras. Somos ingenuas y nos empeñamos en colocarnos en situaciones muy confusas. No haber sido iniciadas en estas cuestiones significa encontrarnos en una fase de nuestra Vida en la que sólo estamos capacitadas para ver lo que es patente.
Entre los lobos, cuando la hembra deja a las crías para ir a cazar, los pequeños intentan seguirla al exterior de la guarida y bajar con ella por el camino. Entonces ella les ruge, se abalanza sobre ellos y les pega un susto de muerte para obligarlos a huir y regresar corriendo a la guarida. La madre sabe que sus crías aún no saben valorar y sopesar a otras criaturas. Ignoran quién es el depredador y quién no. Pero a su debido tiempo ella se lo enseñará por las buenas y por las malas.
Como los lobeznos, las mujeres necesitan una iniciación parecida en la que se les enseñe que los mundos interior y exterior no siempre son unos lugares placenteros. Muchas mujeres ni siquiera han recibido las lecciones básicas que una madre loba les da a sus crías acerca de los depredadores, como, por ejemplo: si es amenazador y más grande que tú, huye; si es más débil, decide qué es lo que quieres hacer; si está enfermo, déjalo en paz; si tiene púas, veneno, colmillos o garras afiladas, retrocede y aléjate en dirección contraria; si huele bien, pero está enroscado alrededor de unas mandíbulas de metal, pasa de largo…
Supongamos, por ejemplo, que una mujer ingenua se equivoca una y otra vez en la elección de su pareja. En algún lugar de su mente ella sabe que esta pauta es inútil, que tendría que abandonarla y seguir otro camino. Muchas veces incluso sabe lo que tendría que hacer. Pero una especie de hipnosis de tipo Barba Azul la induce a seguir la pauta destructiva. En la mayoría de los casos, la mujer piensa que, si insiste un poco más en la antigua pauta, la sensación paradisíaca que anda buscando aparecerá en un abrir y cerrar de ojos.
En otra situación extrema, no cabe la menor duda de que una mujer adicta a alguna sustancia química tiene en lo más hondo de su mente a unas hermanas mayores que le dicen: “¡No! ¡No hagas eso! Es malo para el cuerpo y para la mente. Nos negamos a seguir.” Pero el deseo de encontrar el Paraíso induce a la mujer a casarse con Barba Azul, el traficante de drogas de los éxtasis psíquicos.
Cualquiera que sea el dilema en el que se encuentre atrapada una mujer, las voces de las hermanas mayores de su psique siguen instándola a ser juiciosa y prudente en sus elecciones. Son las voces de lo más hondo de la mente que susurran las verdades que tal vez una mujer no desea oír, pues destruyen su fantasía del Paraíso Encontrado…
 Con el tiempo, la Mujer que se ha dejado atrapar de esta manera se dará cuenta de que sus esperanzas de una vida digna para ella y sus hijos son cada vez más escasas. Cabe esperar que, al final, abra la puerta de la habitación que encierra toda la destrucción de su vida. Aunque el que destruya y deshonre su vida sea el compañero afectivo de la mujer, el depredador innato que lleva en su psique está de acuerdo con él. Mientras se obligue a la mujer a creer que está desvalida y/o se la adiestre a no percibir conscientemente lo que ella sabe que es cierto, las dotes y los impulsos femeninos de su psique seguirán siendo exterminados.
 Cuando el espíritu juvenil se casa con el depredador, la mujer es apresada o reprimida en una época de su vida inicialmente destinada al desarrollo. En lugar de vivir libremente, la mujer empieza a vivir de una manera falsa. La falaz promesa del depredador es la de que la mujer se convertirá en cierto modo en una reina, siendo así que, en realidad, se está planeando su asesinato. Existe un medio de salir de todo eso, pero hay que tener una llave. La Llave del Conocimiento.
Clarissa Pínkola.- Mujeres que corren con lobos.

Las personas autorrealizadas MASLOW

  Abraham Maslow   fue un psicólogo estadounidense perteneciente a la perspectiva humanista, la “tercera fuerza” en lo que a corrientes psic...